Monterrey, México a 8 de diciembre de 2021
La corrupción debe dejar de contarse solo en millones, debemos de contar a cuántas personas se le están afectando sus derechos humanos elementales cuando sucede un desvío o robo de recursos públicos,.
Por citar un ejemplo los 700 millones que se desviaron de la UANL a través de empresas factureras representan las cuotas de 281 mil personas que debieron pagar 2,485 pesos por concepto de “cuota de rectoría” obligatoria para poder cursar alguno de los programas de licenciatura en la UANL.
La corrupción es un problema grave, más aún cuando esta sucede en el seno de una universidad, pues ahí se forman a las personas que mañana estarán al mando en posiciones privadas y públicas, y porque cada peso que se roban impacta directamente en el derecho humano a la educación de las personas más vulnerables del estado.
En el marco de los días internacionales contra la corrupción y los derechos humanos, vale la pena recordar que durante 2021, en Redes Quinto Poder:
–Pudimos documentar la poca o nula acción de los organismos encargados de prevenir y sancionar la corrupción en nuestro estado, que además gastaron decenas de millones de pesos de los contribuyentes.
–Denunciamos ante la FGR la corrupción en el programa del gobierno federal “Jóvenes Construyendo el Futuro.
– Visibilizamos la inacción de los órganos anticorrupción del estado en el caso de corrupción de personas servidoras públicas y/o funcionarias de la Universidad Autónoma de Nuevo León, de las arcas universitarias fueron desviados más de 700 millones de pesos, sin que la Fiscalía Anticorrupción haya iniciada investigación alguna. La secretaria ejecutiva del Sistema Anticorrupción no se pronunció al respecto y la Comisión de transparencia ha sido incapaz de verificar el cumplimiento de obligaciones de la universidad.
Tenemos en Nuevo León el pacto de impunidad, donde la máxima es “tapaos los unos a los otros” todo el entramado de instituciones devinieron en agencias de colocación, con cuotas y cuotas donde hasta hoy lo único que han hecho es gastarse puntualmente el dinero de los contribuyentes.
Desde luego debemos seguir señalando, visibilizando y sancionando socialmente la corrupción, y recordar todos los días del año que la corrupción mata y afecta los derechos humanos de las personas y sobre todo de las personas en situación más vulnerable.